La crisis sanitaria actual ha provocado cambios inesperados en todos los sectores económicos. Si bien, algunos ya venían adaptándose a la era digital, otros han tenido que empezar, casi que a la fuerza.
Según expertos, es complejo hacer una previsión a mediano plazo sobre los cambios que tendrá el sector inmobiliario o los que pueden venir más adelante. Sin embargo, ya se pueden visibilizar algunos cambios, que, siendo optimistas, se pueden traducir en oportunidades para el sector.
Es verdad que ahora mismo todos tenemos una sensación de incertidumbre porque no sabemos qué pasará el próximo año, lo que sí sabemos es que es tiempo de reinventarse y de aprovechar, por decirlo de algún modo, la experiencia que nos deja esta crisis.
En el sector inmobiliario vemos varias formas de evolucionar y al mismo tiempo de identificar qué buscan los usuarios. A continuación listamos algunas oportunidades que tiene el sector, que puede fortalecer o empezar a trabajarlas.
Digitalización y adaptación tecnológica
Estos meses en casa ha evidenciado que ahora más que nunca el sector inmobiliario debe tomar distintos caminos para promocionar sus productos y servicios. Todo apunta a que los usuarios seguirán utilizando la tecnología para casi todo tipo operaciones.
Las opciones de teletrabajo, compras, tours virtuales, videollamadas para resolver dudas o presentar el inmueble o firmas digitales de documentos han hecho que la inversión en tecnologías sea mayor, ya que no solo permiten agilizar los procesos de compra y venta, sino también adaptarse al uso plataformas que facilitan la relación con los clientes.
Para implementar este tipo de cambios, son varias las empresas que ofrecen un servicio completo, no solo de asesoría sino de ejecución. Encargándose de revisar las prioridades de la empresa y de brindar un servicio profesional y experimentado.
Cambio de gustos
El encierro ha hecho que muchas personas se replanteen el lugar en el que desean vivir. Si algo nos ha dejado el confinamiento es que necesitamos de luz y mucho más espacio para sentirnos a gusto.
Por ello, las personas están apostando por viviendas de mayor superficie, mucho más iluminadas con sistemas automatizados de energía, seguridad, comunicación y bienestar. Así como inmuebles con balcones, terrazas o jardines que les permitan desconectar y tener una mayor sensación de libertad.
Variaciones en el alquiler turístico
El Covid-19 ha afectado notablemente el turismo a nivel mundial. Por lo que es muy probable que todos esos pisos y casas que se usaban para el alquiler turístico pasen a ser viviendas de alquiler a largo plazo, como ya lo hemos empezado a ver en algunas ciudades de España.
Variaciones en precios
Hasta el mes de marzo de este año, los precios de la vivienda tanto de alquiler como de venta venían en aumento. De acuerdo con los datos de la Agencia Negociadora de Alquiler, actualmente se detecta un aumento en la oferta de inmuebles de alquiler, así como una disminución en los precios y como lo mencionamos anteriormente, un cambio en las necesidades de inquilinos y compradores.
Diversidad en el mercado
El teletrabajo ha hecho que algunos inmuebles que antes eran oficinas, queden vacíos o se destinen a oficinas flexibles. Según expertos, es muy probable que se necesiten oficinas de uso a corto plazo o espacios compartidos que en consecuencia podrán generar nuevos prototipos de negocio.
Todavía no podemos prever con certeza cuál será el impacto real del Covid-19 en el sector inmobiliario. La incertidumbre generalizada ha hecho que se vaya trabajando sobre la marcha en algunos sectores, pero está claro que el inmobiliario tiene la oportunidad de alinearse con vendedores y compradores, de tomar la tecnología por la mano, ejecutando acciones que ayuden a posicionar la marca del negocio.
Dentro de nuestros retos está el de saber cómo combinar estrategias tanto online como offline, de manera que podamos cumplir con nuestros objetivos y cubrir las necesidades de nuestros usuarios. Ahora más que nunca la visibilidad en Internet es prioritaria.