El Covid-19 ha llegado de golpe a nuestras vidas obligándonos a hacer un alto y llevar la vida mucho más despacio. Nunca nos detuvimos a pensar en lo que podría pasar si el virus llegaba a España y mucho menos en cómo serían los días de cuarentena y el impacto económico que este generaría.
Lo cierto es que como empresa, muy seguramente, no teníamos preparado un plan de crisis, ahora la estamos afrontando y hemos tenido que pensar en cómo implementarlo rápidamente, en cómo sobrevivir y cómo salir de ella.
Alguien decía que las tragedias hay que verlas como una oportunidad y puede que en casos como este sea una oportunidad para reinventarse y empezar a diseñar un plan de recuperación post-covid, planes en donde las empresas tendrán que ser ágiles y muy creativas.
Qué tener en cuenta para la recuperación
Seguridad del personal
Para empezar a plantearnos un plan de recuperación, lo primero en lo que debemos pensar es en el personal, priorizar su seguridad y compromiso. En ese sentido es esencial hacerle saber a nuestros colaboradores que seguimos contando con ellos y que son de vital importancia para la empresa o en este caso la agencia inmobiliaria.
Es necesario ser transparente con el personal e informarlo de todas las medidas que se están tomando y de sus avances. Asimismo, será conveniente plantear ajustes en la carga laboral y mayor flexibilidad horaria.
Por lo general, los trabajos relacionados con marketing se pueden hacer a distancia, así que si pensamos en fortalecer nuestra marca durante este tiempo, es un trabajo que se puede hacer tranquilamente desde casa.
Reformulación de estrategias
De otra parte, será muy importante empezar a reformular la estrategia que ya se había trazado para este año. Está claro que no podemos seguir ejecutándola más que nada porque la gente está muy sensible con la crisis y lo último que quiere es que les vendamos a saco.
Y aquí es donde tenemos que echar a rodar toda nuestra imaginación y creatividad, ya que tenemos que pensar en cómo reconducir la estrategia de negocio que habíamos formulado a principio de año. Para ello tendremos que revisar:
- La liquidez de la empresa en un corto y mediano plazo: esto nos permitirá saber hasta dónde podemos llegar, qué acciones podemos implementar y qué recortes tenemos que hacer.
- Evaluación de riesgos: no sabemos lo que pasará con esta pandemia, ahora mismo el mundo está lleno de incertidumbre. Sin embargo, desde nuestra agencia tenemos que detenernos un poco y analizar todas y cada uno de los riesgos que genera este parón.
Por tanto la evaluación de riesgos, en primera medida, debe enfocarse al impacto financiero durante estos dos primeros meses, haciendo especial énfasis en las áreas de negocio críticas en el ámbito humano, financiero, tecnológico y operativo.
Revisión de operatividad y recursos
En el caso de un cierre no planificado tendremos que revisar con lupa cuáles serán los primeros frentes a cubrir en la vuelta a la normalidad. Así que tendremos que ver en qué nos quedamos, cómo vamos a reanudar operaciones y qué estrategias se utilizarán. Siempre teniendo presente que venimos de un periodo muy inestable tanto económico como emocional.
Asimismo, tendremos que revisar los recursos con los que contamos y hacer un balance de los que teníamos antes de la pandemia y los de ahora, puede que no sean los mismos, por tanto esta revisión tiene que ser lo más detallada posible.
Sea productivo durante el parón
Hemos hablado antes de la necesidad de mantener viva la marca. Si tenemos personal trabajando en casa podremos implementar acciones que tiendan al posicionamiento de marca. Es lo que hacen muchas empresas, recordarle a sus clientes que siguen vivos, por ello, podemos redireccionar las redes sociales y ponernos en los zapatos de todas esas personas que están en casa. Podemos mostrar a nuestros clientes que estamos haciendo durante la pandemia e informar que seguimos trabajando para cuando regresemos a la normalidad.
Fortalecer la comunicación externa
Finalmente, y quizá uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta, es la comunicación que tengamos con nuestros clientes. Aunque no lo parezca, ellos también quieren saber qué estamos haciendo y con qué regresaremos. Así, que en este sentido podemos trabajar en un plan de comunicación para mantener informados a nuestros clientes.
En definitiva, es tiempo de quedarse en casa, pero eso no quiere decir que paremos del todo, puede que el regreso a la normalidad sea lento y a su vez agresivo, pero será un puntazo si planificamos cómo regresaremos al ruedo.